12 de septiembre de 2020

ATMOSFERAS


He sido predestinado a recoger la lluvia
Sus escurridizos pensamientos de agua
reclamándome en los aureales
Y en un repentino cansancio, bajo una desolación
abre el desierto sus puertas de grises pomos
Resucito en las acciones muertas
Del hoy, en su camino febril




Me enfrío entre los hijos de la media noche anidando la tempestad de los sueños rotundos de la magia que no cesa en los ojos bellos de un centauro enclaustrado en la novena declinación de mi utopía ensimismado por el color que todo lo percibe a los hilos de una puerta entreabierta únicamente para mi extraño y amado espacio alejado a la turbulencia del bochornoso espíritu aterrador que no me ama



No se movían las ramas
Paralizadas de luz
La lluvia las extrañaba
Solo yo y el cordero negro
El cordero negro y solo yo
movíamos su sequedad
Baldeando pasos de amo y mugre



VERSO ROJO

1 comentario:

  1. En mis doce apóstoles hallo a mi atmósfera

    "Sería el Universo tan grande como una gota de lluvia
    Pero tan pequeño que no cabría la más absoluta ceguera"

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